lunes, 19 de enero de 2015

Gonzalo de Berceo: "El ladrón devoto" (Milagros de Nuestra Señora)

Era un ladrón malo   que más querié furtar
que ir a la eglesia   nin a puentes alzar;
sabié de mal porcalzo   su casa governar,
uso malo que priso,   no lo podié dexar. […]

Entre las otras malas,   habié una bondat
que li valió en cabo   e dioli salvedat;
credié en la Gloriosa   de toda voluntat,
saludábala siempre   contra la su Magestat. […]

Como qui en mal anda  en mal ha a caer,
hobiéronlo con furto   est ladrón a prender;
non hobo nul consejo   con qué se defender,
judgaron que lo fuesen   en la forca poner.

Levólo la justicia   pora la crucejada,
do estava la forca   por concejo alzada;
prisiéronli los ojos   con toca bien atada,
alzáronlo de tierra   con soga bien tirada. […]

La Madre glorïosa,   duecha de acorrer,
que suele a sus siervos   ennas cuitas valer,
a esti condempnado   quísoli pro tener,
membróli del servicio   que li solié fer.

Metióli so los piedes   do estaba colgado
las sus manos preciosas,   tóvolo alleviado:
non se sintió de cosa   ninguna embargado,
non sovo plus vicioso   nunca nin más pagado. […]

No hay comentarios:

Publicar un comentario